15 julio 2005

El Impulso Invisible


De la palmera que se yergue y, elevada, produce sombra como una isla que parece pausar el incesante baño de sol; ¿quién repara en el esfuerzo vertical, gravitatorio, que realiza impulsando las raíces que le hagan ser abrazada por la madre Tierra; de su inmenso impulso hacia la profundidad que premia su robustez ante los vientos que la obligan sinuosa? Y yo me pregunto sobre la parte visible del Mundo.

- - -

Unos contienen el vino, otros contienen aceites
en la bóveda ahuecada que delimitó sus muros.
Yo, pequeño y más delgado, me ahueco
para otra exigencia: para complacer
las lágrimas que se precipitan.
El vino se enriquece y el aceite se sigue
refinando en el tarro.
¿Qué pasó con las lágrimas?
Me apesadumbraron, me cegaron,
mis corvas hicieron titubear,
al final me hicieron quebradizo
y me vaciaron.

Tarro de Lágrimas
, de R.M. Rilke.