06 julio 2005

Galopes para Calipso


Los corceles de Calipso galopan las riberas exalando, en su trotar, albas brisas espumosas; sumergiéndose en el mar buscando espirales caracolas donde la niña ninfa quiere escuchar melodías melancólicas. A cada mirada de la niña obedecen los de ignota doma, casta limpia, de alto númen con silueta recia y candorosa; escuchando la canción de una risa, que no es otra, que la brisa matinal de la ninfa ribereña.